Con la creciente demanda de los negocios online, también han aumentado la cantidad de conflictos empresa, derivados del manejo de pagos en línea. No se trata sólo de cómo se estén llevando a cabo, sino de un proceso mucho más directo que involucra gran parte de riesgo por parte de su empresa, desde complicaciones legales, hasta problemas con el cobro o la gestión financiera que se está llevando a cabo.

¿Cómo funcionan los pagos en línea?

Seguramente todos hemos, al menos una vez, hecho un pago o compra en línea, ¿parece demasiado sencillo verdad? Pues no lo es, detrás de todo esto ay una compleja red de información compartida por varias partes para completar una transacción de tarjeta de crédito en línea. Después de hacer clic en "pagar" u "ordenar", la información de su tarjeta de crédito se cifra por motivos de seguridad y se envía a una cuenta de comerciante. Ellos, a su vez, verifican la compra y la procesan. El dinero puede ser enviado a su cuenta bancaria y la transacción está completa.

Los motivos pueden ser variados, desde problemas con el banco, con el cliente o con los proveedores, por eso hemos preparado una serie de puntos a tomar en cuenta para evitar esta clase de conflictos:

Las cuentas de comerciante son creadas por un banco mercantil (llamado adquirente). El banco liquida y deposita los fondos de la transacción en su cuenta bancaria. Son responsables de garantizar que el pago se realice en su cuenta una vez que se apruebe la transacción.

¿Cómo se originan los conflictos empresa y cómo evitarlos?

Los motivos pueden ser variados, desde problemas con el banco, con el cliente o con los proveedores, por eso hemos preparado una serie de puntos a tomar en cuenta para evitar esta clase de conflictos:

1. Configuración de pagos. Asegurémonos que el método de pago que estamos usando sea confiable para nosotros y para nuestros clientes, además de que todas las operaciones puedan realizarse a través de un entorno 100% seguro y fiable.
2. Procesamiento de pagos: este es uno de los lugares más comunes dentro del conflicto, ya que los bancos o sistemas de pago, a veces pueden presentar desajustes o problemas con las cuentas.
3. Tarifas: antes que nada, debemos dejar al cliente perfectamente claro que se va a pagar y por concepto de qué, lo que le evitará muchos problemas futuros.
4. Tamaño: Cuanto estamos manejando; si se trata de una empresa pequeña, lo más seguro será que las tarifas y comisiones representen un porcentaje importante de las ganancias.
5. Prevención de fraude: la alerta máxima llegados a este punto y la clave para evitar conflictos legales.

Ahora sí, con esto y una buena asesoría legal podrá operar en línea evitando los temidos conflictos empresa.